LOS HOMBROS



"Descansa y relaja tus hombros sobre un pecho que deja ver un corazón generoso
 y seducete a ti misma con sus suaves movimientos".






Los hombros son el lugar de asiento de la carga de la vida: "llevas la vida sobre tus hombros". Es aquí donde podemos notar el peso de la responsabilidad de todas nuestras actuaciones. pero a veces también nos cargamos con el peso de las actuaciones de los demás. Los hombros forman parte móvil de los brazos y por tanto tienen que ver con la energía que inicia la acción. Y es aveces en este punto donde se ponen de manifiesto los conflictos respecto a la coherencia que existe entre lo que deseamos hacer y lo que realmente hacemos o dejamos de hacer. Cuando estas situaciones se van repitiendo a lo largo de nuestra vida, la energía puede quedar bloqueada o estancada en este punto de nuestro cuerpo. Y tanta energía concentrada sin posibilidad de evacuación acaba por crear una sensacion de solidez materializada en forma de rigidez muscular.

Lo ideal seria que la energía que procede del deseo del corazón llegara en forma natural hasta tus hombros y una vez allí te hicieras responsable de ese deseo. Una vez asumido dejarías que la energía se deslizara hacia tus brazos y finalmente a tus manos, la cuales permitirán que este fuera manifestado al mundo. Así la energía seria liberada y transformada en una acto de esencia material, creativa o emocional. Los hombros están relacionados con el centro energético situado en la garganta (quinto chakra) y por tanto unas de sus funciones es comunicar. Me refiero a esa comunicacion que va mas allá de las palabras. Es una comunicacion espontánea y coherente con nuestros verdaderos sentimientos, emociones e intenciones, una comunicacion que delata a la mentira expresada de forma conciente.

Nuestros hombros hablan claramente de como nos sentimos e incluso de que pensamos acerca de los demás y de nosotros mismos. Es importante que te detengas a observar tus sentimientos y a valorar si estos están en conflicto con lo que haces y/o con lo que piensas. Cuantos mas conflictos existan en tu interior entre estos tres aspectos (sentimientos-pensamientos-actos) mas tensos y mas rígidos estarán tus hombros. Antes de empezar a mover esta parte de tu cuerpo preguntate si participas de forma activa y plena en la vida, si tienes miedo a mostrarte tal cual eres con tus propios sentimientos y pensamientos, si actúas libremente y de forma conciente, si haces lo que deseas...... Cuando no podemos contestar positivamente a estas preguntas, significa que en menor o mayor medida contenemos nuestra mas autentica e intima expresión encerrándola en nuestro interior, y por tanto colocamos una gran tensión mental y represora sobre nuestros hombros. La energía del miedo se apodera de esta parte de nuestro cuerpo.

Cuando un músculo se contrae, la energía utilizada para ello es mental. Nuestro cerebro ha producido esta orden. De algún modo la mente bloquea los hombros impidiendo así que los deseos se manifiesten, los reprime (por ejemplo me gustaría hacer tal actividad, pero no lo hago porque mi mente me dice que podría perder a mi pareja (miedo), o mi trabajo (miedo), o no creo que sea capaz).

A través del movimiento de nuestros hombros expresamos nuestras personales actitudes frente a los demás y nosotros mismos. Los hombros para su movilidad requieren también de tu espalda superior (de los hombros hasta los omóplatos). Esta zona esta relacionada con tu identidad, con los sentimientos y pensamientos que tienes respecto a ti misma. Y mantendrás reprimidos aquellos aspectos de ti que no eres capaz de aceptar y/o expresar.

A veces la tensión o rigidez situada en la parte alta de la espalda es ira reprimida, o bien fuertes sentimientos de frustracion dirigidos hacia ti misma por no haber podido materializar tus proyectos o ilusiones. Esto a veces es producto de haber cambiado nuestros propios deseos y metas por los de otros con la finalidad de complacerlos y así conseguir su aceptación, su cariño, amor o respeto. De algún modo hemos actuado como creíamos que se esperaba que lo hiciéramos y nos hemos traicionado a nosotros mismos.

A través de los movimientos de la Danza Oriental podemos descubrir los secretos que se esconden en nuestros hombros, dejando que por fin salgan a la luz y así liberar la rabia, frustracion o miedo que los mantenían constreñidos. Y entonces por fin reconocer esas aspiraciones, deseos y ambiciones durante tanto tiempo ocultas. Liberando tus hombros das el primer paso para que tu destino de vida se manifieste, para empezar a tomar conciencia de tu propósito espiritual en esta existencia.

Bien, pues ahora nos disponemos a romper la inercia e iniciar el movimiento de nuestros hombros: vamos a actuar, vamos a comunicar, vamos a ser.

Colocate de pie, en la posición básica que ya conoces. Apreta tus nalgas y permanece con las caderas quietas y en su centro (puedes visualizar que tus caderas son como la maceta que contiene unas bellas flores muy fuertemente arraigadas a la tierra mediante sus abundantes raíces). Es importante que tu cabeza también permanezca centrada y el cuello relajado. Los hombros hacia abajo, y los omóplatos lo mas cerca posible el uno del otro, pero sin experimentar tensión en tu espalda. Eleva tu caja torácica y respira libremente. Pon una música lenta y relajante y cierra tus ojos. Dibuja de forma muy cerca círculos alternos con tus hombros. Imagina la esfera de un reloj y visualiza como al rotar cada hombro pasa por cada una de las horas impresas en la esfera. No tengas prisa, tomate tu tiempo, cuanto mas lento el movimiento mas sensual y mas relajante. Respira profundo e imagina cosas agradables (saboreando un bombón de chocolate, oliendo una flor,recibiendo un masaje, sumerjiendote en el mar). Enciende una barita de incienso y disfruta del aroma mientras haces rotar tus hombros, adivinando la expresión cándida y llena de placer que debe estar mostrando tu rostro.

SHIMMY DE HOMBROS: En la misma posición básica empieza moviendo los hombros uno y otro delante y atrás en posición. Respira profundo, no retengas la respiración en ningún momento. Debes sentir que el movimiento viene del centro del omóplato cuando lo empujes hacia delante, sobretodo no levantes los hombros (debes mantenerlos relajados). Trata de hacer este movimiento a diferentes velocidades. Si notas que tienes problemas para desbloquear esta parte del cuerpo, tendrás que dedicarle algunos minutos mas durante lo largo del día hasta conseguir fluidez.

Cuando consigas realizar el twist de hombros a un ritmo lento y medio, animate con el movimiento rapido de Shimmy (haz el movimiento mas pequeño y mas rápido), libera tu banco de memoria y de prejuicios que te permitan sentir confortable con esta parte de tu cuerpo. Los hombros se relacionan a veces con los estándares de belleza relacionados con los pechos, su forma, su tamaño, juventud, etc. Preguntate como te sientes frente a esta parte de tu cuerpo y reconciliate con ella, y refuerza los lazos de cariño a través del Shimmy.

El Shimmy de hombros es uno de los movimientos mas saludables de la Danza Oriental, el meridiano del intestino delgado, que también esta conectado con los ovarios pasa por el centro de ambas paletillas. Cuando la parte superior del cuerpo se contagia con la vibración del Shimmy, se relaja y aumenta su temperatura permitiendo que la fría rigidez que se había establecido en los hombros se transforme en calor, vitalidad y alegría.

"Yo soy en esencia un espíritu materializado en un cuerpo físico que vibra al son del sonido de las vocales del nombre que me pusieron al nacer. Si....eso Soy Yo en esencia. Pero en esta existencia de manifiesto  de múltiples formas. Experimento todas las facetas a través del movimiento de mis hombros, dejo fluir mis sentimientos, pensamientos, emociones, sensaciones.....no los reprimo.....dejo que se expresen, sin deternerme en ninguno de ellos".