NOCHE MAGICA

MIS COMPAÑERAS DEL GRUPO FOLKLORE.
ESTHER, ALICIA, CRISTINA Y YO EN EL PRIMER ENSAYO.

Os hago esta entrada para explicaros mi experiencia como bailarina de la comparsa de su Majestad Melchor. Gran día el 5 de marzo, un día vivido lleno de momentos mágicos, de emociones intensas que ya comencé a sentir desde que me subí a ese autocar que me llevaba al sitio de salida de la cabalgata. El mismo día de la cabalgata todas las personas que participabamos teníamos que estar a las 14:00 horas en el pabellón donde hemos hecho estas semanas los ensayos. Había que irse a maquillar y ponernos bien guapas para recibir a sus majestades los Reyes. Quizás ese momento es el que se me hizo mas largo que la misma cabalgata entera, ya que disfrute tanto bailando que no me entere hasta que llegue a la Calle Sepulveda de Barcelona.

Llego el momento en que nos llamaban por el micro a las comparsas para que nos dirigiéramos a nuestro autocar. La emoción iba subiendo cuando en fila india circulaban todos los autocares hasta el lugar del destino. Desde la ventana, miles de niños ya nos saludaban con sus manos y nos miraban con sus ojos asombrados, nos decían adiós y su cara de "alucinación" lo decían todo. Claro, es que estaban viendo a gente mágica que esta noche se iba a colar en sus casas ha dejar los regalos que tenían escritos y pedidos en la carta que sostenían en sus manos.

Una emoción interna me empezó a recorrer, emocionada con unas ganas de llorar increíbles, de pensar: "que bonitos". A la vez me paso por la cabeza los muchos años que yo he llevado a mi hija a ver esa misma cabalgata, mi niña la que ya me cumple 12 años en breve.

Llegamos al sitio y esperamos un ratin, momento de comer alguna galleta y hacer un pis, la cabalgata iba a ser larga así que al lavabo jaja!

Comenzo la cabalgata, auriculares puestos (por donde  solo nuestra comparsa solo oíamos nuestra música). Momentazo, de verdad, las calles repletas, gente por todos lados, niños mirándonos embobados, que hacían todo lo posible por llamarnos, o tocarnos, estiraban sus brazos para que agarrasen su carta. Que bonito, les miraba, les guiñaba un ojo, les tiraba besos, les tocaba su manita y miraban a sus madres con los ojos desorbitados y diciendo: Me ha tocado!!

Niños de todas las edades con sus cartas bien agarradas en sus manos, nos saludaban con sus manos, nos llamaban a gritos. Los balcones repletos de gente, que al mirar arriba y saludarlos nos respondían con sonoros gritos. La música, serpentinas en el aire.....grandes momentos y recuerdos.

El corazón lo lleve alborotado en todo momento, muy emocionada, muy gratificante la experiencia, miles de caras de ilusión se acomodan en mi corazón para recordar eternamente. Aconsejo esta experiencia a todo el mundo que tenga la ocasión de poder participar en ella. Realmente ojala el año siguiente pueda repetir, es tan bonito, ojala pueda volver a poner mi granito de arena en este sueño de los mas pequeños.

DÍA DE LA CABALGATA, A REPARTIR ILUSION!!!